Toca madera

Si el primer instrumento de los humanos fue nuestra propia voz y el segundo fueron los instrumentos de percusión, no hay duda que el tercero fue un instrumento de viento, seguramente una caña de bambú.
El viento siempre ha hecho silbar las cañas y nosotros lo hemos querido imitar. Te acercas al río, cortas una caña y soplas dentro. Quizás a la primera no suena, pero cuando lo pruebas varias veces seguro que encuentras la manera de hacerla sonar.
Los instrumentos de la familia de viento-madera se clasifican en tres grupos en función de la forma cómo producen el sonido: las flautas (también llamados instrumentos de bisel) , los clarinetes (también llamados instrumentos de caña simple) y los oboes y los fagotes (llamados de caña doble).